Adaptar la justicia a la infancia. Ese es el objetivo del primer Juzgado especializado en Violencia contra la Infancia y la Adolescencia de nuestro país que lleva cinco meses funcionando en Las Palmas de Gran Canaria. En su sala de exploración -en la imagen- los menores hacen una única declaración – la llamada prueba preconstituida-, en un entorno amable, con decoración acogedora, luz natural y hasta una mascota. “Se quiere garantizar así su protección frente al impacto traumático que pudiera derivar del contacto con los operadores jurídicos”, nos cuenta en entrevista el magistrado que está al frente, Tomás Martín. Este proyecto piloto durará 24 meses y está previsto que se extiendan estos juzgados por toda España. |